La arquitectura mexicana ha sido enriquecida a lo largo de los años por talentosos despachos, y uno de los más destacados es C Cúbica, fundado en los años 90´s por los visionarios arquitectos Emilio Cabrero, Andréa Cesarman y Marco Coello. El nombre de la firma surgió de la inicial compartida «C» en los apellidos de sus fundadores, reflejando así la unidad y colaboración que les ha caracterizado. Con casi 33 años de experiencia en el despacho, esta entrevista exclusiva con el Arquitecto Emilio Cabrero nos permitirá conocer más sobre la fascinante trayectoria de C Cúbica y su influencia en la arquitectura y diseño de interiores en México.
El inicio de este despacho se remonta a sus años de estudiante, cuando el equipo se formó a través de proyectos en conjunto. Desde entonces, su unión ha sido esencial, ya que cada uno de los cofundadores aporta tres visiones distintas en un mismo proyecto, lo que les ha permitido evitar polarizarse en las decisiones y enriquecer sus diseños con diversas perspectivas.
En sus inicios, uno de los mayores retos para C Cúbica fue la limitación en el diseño de interiores durante los años 90. Sin embargo, esto no detuvo su creatividad. La firma se aventuró a adentrarse en este campo y rápidamente se destacó por su enfoque innovador y audaz. «Te vas envolviendo en el mundo de todas las herramientas que hay para el interiorismo», comenta el Arquitecto Emilio Cabrero, haciendo referencia a su pronta incorporación en este ámbito.
En aquellos tiempos, para adquirir diversas herramientas y materiales, el equipo necesitaba viajar a Estados Unidos, ya que en México no había una amplia oferta para sus necesidades. Sin embargo, esto no fue un obstáculo para C Cúbica, y su búsqueda de nuevas soluciones y su empeño en superar limitaciones los convirtieron en pioneros que rompieron con los esquemas tradicionales del diseño de interiores.
Con el paso del tiempo, las tendencias en diseño han evolucionado, y en la actualidad, estas son cíclicas. Atrás quedaron los tiempos donde los colores crema o marfil dominaban el panorama. Ahora, México se ha convertido en una nueva estética contemporánea y es valorado el uso de elementos propios del país en el diseño de interiores. «Ya no está mal visto que las cosas sean mexicanas», destaca el Arquitecto Emilio Cabrero.
En cuanto a sus proyectos, este despacho ha destacado tanto en la arquitectura como en el diseño de interiores. La firma entiende que una casa no solo se vive por fuera, sino también por dentro. Es por ello que su enfoque integra ambos aspectos, buscando una vinculación armoniosa entre el exterior y el interior. Su lema de «Lo hecho en México está bien hecho», utilizado en la edición de Design House en 2017, refleja su compromiso con la identidad y el talento mexicano.
Con 33 años de trayectoria y 15 años en Design Week, C Cúbica ha logrado un impacto significativo en la arquitectura mexicana. Su capacidad de adaptarse a las tendencias cambiantes, su valentía para enfrentar desafíos y su pasión por el diseño han sido clave para el éxito de la firma. Hoy en día, el 85% de los componentes de una casa son de origen mexicano, y su legado continúa inspirando a nuevas generaciones de arquitectos y diseñadores en el país.
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